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Published on: Editorial

Cuando la división no “garpa” los une la conveniencia

En el inicio de la semana pudo verse cómo mágicamente Cristina Fernández y Axel Kicillof lograron cerrar la grieta que los separaba en pos de que el Justicialismo no termine aplastado en las elecciones de Buenos Aires. No fue magia, como decía el spot de campaña de la expresidenta hace casi una década.
San Juan no es ajeno al pragmatismo de esa política, porque: como es arriba es abajo. Días antes de la primera sesión en Diputados, el presidente del PJ local, Juan Carlos Quiroga Moyano anunció que iba a intentar que los legisladores justicialistas volvieran a las bases y trabajaran juntos. Se refería a Franco Aranda y a Gabriel Sánchez. La seducción se la olvidó en otro lado y no se obró el milagro.
En la mañana de este martes, la intendenta de Chimbas, Daniela Rodríguez de Gramajo, encabezaría el periodo de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante. El departamento es uno de los territorios del Justicialismo en pugna con los “ismos”, como ya lo marcó el exintendente Fabián Gramajo, que está anotado para formar parte de la lista de candidatos a las Legislativas, pero que aún es el más postergado. La división no es nueva y data del ocaso de las elecciones del 2023, en las que las urnas le fueron esquivas al Justicialismo después de 30 años. Desde entonces se armó un equipo de disidentes conformado por el chimbero y por el intendente de Rawson, Carlos Munisaga. La unión tiene sus bases en la separación del uñaquismo. Además, en esa fuerza el interés está puesto en inclinar la balanza con el caudal de votos.
Del otro lado, estaba el resto del justicialismo, con sus atomizaciones, pero en bloque. Hasta hace una semana las aperturas de sesiones en los Concejos Deliberantes y las Fiestas Departamentales eran terrenos sagrados en los que no se mezclaban esas facciones. Hoy ocurrió el milagro, pero no fue magia, como decía Cristina. El reloj empezó a correr y los conteos no dan, por lo cual habrá que masticar y tragar.
Tal es así que la foto de la jornada de hoy fue del presidente del PJ, Juan Carlos Quiroga Moyano en tierra gramajista. Al veinticinqueño le endilgan carecer de carisma, no tener vocación de líder y no ser abierto al diálogo. Hoy con todas esas dificultades acuestas, llegó Chimbas. Un gesto. ¿Será la nueva tregua local? ¿Cristina bajó un mandato y hay que alinearse? ¿Vale todo con tal de salvar el partido? No hay magia, hay intereses.