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Published on: Editorial

La guerra interna del PJ: traiciones, rumores y el fantasma de la derrota

Hace una semana el presidente del Bloquismo, Luis Rueda, rompió el hielo y salió a raspar a Cristian Andino, exintendente de San Martín y hombre que suena como “el elegido” de Sergio Uñac para encabezar la lista del PJ en las Legislativas de este año. La frase fue la largada de la campaña sucia hacia los comicios de medio término. Rueda, le recordó a Andino su pasado bloquista y anticipó que si es elegido diputado nacional sólo va a responder órdenes.


El sanmartiniano salió a defenderse y destacó que siempre se ha destacado por su trabajo junto a la gente, evitando cualquier tipo de confrontación directa y cruenta, pero sacándose el saco que intentó ponerle el exsocio político del actual senador Sergio Uñac.


Mientras tanto para Fabián Gramajo, exintendente de Chimbas y también nombre anotado para competir en las Legislativas, los embates empezaron más temprano. Ya fue acusado por el Tribunal de Cuentas, quien no aprobó el ejercicio de 2022 cuando éste aún era jefe comunal y fue acusado de un posible perjuicio por 212 millones de pesos. No fue él quien se defendió, sino que, desde la vereda de enfrente, Emilio Baistrocchi destacó que el organismo de contralor justamente salió a acusarlo a él y al chimbero cuando decidieron enfrentarse al exgobernador Uñac. Esto fue en clara referencia a que los miembros del Tribunal fueron puestos por el pocitano y responden a él. Ahora en las redes sociales acusaron a Gramajo de no vivir en Chimbas, y que tanto él como su esposa Daniela Rodríguez, actual intendenta, manejan el departamento como señores feudales.


El operativo clamor, desde adentro del PJ fue sólo para José Luis Gioja, a quien señalan como “el hombre que necesita San Juan”. Pero en esta tríada sobra uno y falta una mujer. No obstante, la campaña sucia tiene para todos y esta vez la señalada fueron las diputadas provinciales Fernanda Paredes, Marisa López y Sonia Ferreyra, a quienes sindicaron como disidentes del presidente del PJ Juan Carlos Quiroga Moyano. La propia Paredes salió a desmentir la situación argumentando que el Bloque debe trabajar en comunión, “fuerte y fiel a las banderas del Peronismo”.

No obstante, el rumor logró su cometido, logró instalar más desconfianza de la que ya hay en el partido. ¿Podrá el peronismo soportar los embates de una nueva campaña sucia? ¿Finalmente serán estas elecciones de medio término las que le den la estocada letal? Está claro que si no se aglutinan y marchan unidos hacia los comicios, están condenados a perder aún más poder y la carrera hacia el 2027 será aún más cuesta arriba.