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Published on: Editoriales

Que se investigue, dice… pero que no lo nombren

Cristian Andino declaró que “está bien que se investigue” la gestión de Sergio Uñac. Lo dijo sin sonrojarse. Como si no hubiese sido candidato a vicegobernador de esa misma gestión. Como si no se hubiera beneficiado directamente de los más de 14 millones de dólares que el gobierno anterior gastó en empresas de marketing de Buenos Aires solo en 2023. Como si la publicidad que lo mostraba en redes, spots y carteles hubiese caído del cielo.

Pero no. Esa publicidad que lo empujó como vice primero de Sergio Uñac, y luego de Rubén Uñac cuando la Corte le bajó la candidatura al exgobernador, salió de ese presupuesto millonario que hoy está bajo la lupa. No fue inversión institucional. Fue propaganda electoral encubierta, financiada con fondos públicos. Y Andino fue uno de los grandes beneficiados.

Que ahora intente ponerse del lado de la transparencia, diciendo que “hay que medir a todos con la misma vara”, suena más a estrategia de contención que a convicción real. Porque mientras se investiga, él sigue siendo asesor de Sergio Uñac en el Senado. Cobra un sueldo del Estado, pero actúa como si no tuviera nada que ver con quienes gobernaron la provincia durante dos décadas. Como si hubiese aterrizado recién.

El pedido de informes impulsado por el oficialismo incluye los gastos en publicidad entre 2020 y 2023. Incluye, por supuesto, la campaña que lo tuvo a Andino como cara visible del modelo uñaquista. ¿Qué cree que va a aparecer en esa rendición de cuentas? ¿Otra persona en los afiches? ¿Otro nombre en los contratos con agencias porteñas?

La doble moral ya no sorprende, pero sigue indignando. Porque mientras algunos diputados intentan esclarecer en qué se fue el dinero de todos los sanjuaninos, otros —como Andino— juegan a ser comentaristas de su propia película. Quieren dar clases de institucionalidad cuando no pueden ni explicar su propio recorrido.

Que se investigue, claro que sí. Y que no se corte donde conviene. Porque si hay algo que esta provincia necesita, es dejar de premiar el silencio cómodo y empezar a decir las cosas como son. Y una de esas cosas es que Cristian Andino no solo fue parte de ese gasto millonario en marketing. Fue uno de sus productos. Y no fue barato.