El gobierno de San Juan proyecta finalizar y entregar cerca de 2.700 viviendas entre 2025 y 2026, marcando un avance significativo en la política habitacional provincial. Según el cronograma, se planea concluir 1.250 unidades en 2025 y 1.400 más en 2026, mientras la provincia busca garantizar fondos nacionales para fortalecer el plan de construcción.
La Cámara de Diputados de San Juan dio luz verde a un acuerdo con el Gobierno nacional que promete la transferencia de $11.000 millones destinados a viviendas. Sin embargo, los fondos aún no han llegado, lo que ha obligado a la gestión de Marcelo Orrego a sostener las obras exclusivamente con recursos provinciales.
Actualmente, hay 2.650 viviendas en ejecución, distribuidas en 42 barrios planificados durante la gestión anterior. Según Marianella Ardiles, subdirectora del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), las obras avanzan en diferentes etapas, priorizando los proyectos con mayor progreso al inicio del año.
Desde enero, la provincia invirtió $20.000 millones para reactivar obras detenidas. Durante los primeros meses del año, se retomaron aquellas que superaban el 70% de avance, mientras que en octubre se reactivaron las últimas dos, Luz y Fuerza y Caravallo, ambas iniciadas desde cero tras haber estado paralizadas.
El convenio con Nación establece que los fondos se desembolsen contra certificados de obra y abarcan viviendas en 15 departamentos de la provincia. Sin embargo, la falta de transferencias federales no solo afecta la construcción de viviendas, sino también otras áreas, como infraestructura, educación y transporte, sumando una deuda total de $50.000 millones con San Juan.
A pesar de los desafíos, la gestión provincial entregó 1.000 viviendas este año y reactivó el 100% de los proyectos en espera. La llegada de los $11.000 millones comprometidos podría permitir la incorporación de nuevos barrios, ampliando la oferta habitacional en la provincia y brindando una solución a la creciente demanda.
