Las temperaturas extremas registradas en San Juan durante los últimos días de junio y comienzos de julio provocaron fuertes pérdidas en los cultivos de invierno, sobre todo en las verduras de hoja. Según datos de la Sociedad de Chacareros, entre un 30% y 40% de la producción fue afectada por las heladas y la nevada que se registró el domingo, especialmente en zonas como el Médano de Oro.
Acelgas, lechugas, rúculas y remolachas fueron algunas de las variedades más dañadas. También hubo impacto en cultivos de verano que aún quedaban, como tomates y pimientos, aunque en menor medida.
Sin embargo, a pesar de la caída en la oferta, los precios no repuntaron. Desde el sector explican que esto se debe a la baja en el consumo y al ingreso de mercadería desde otras regiones del país, que mantienen la oferta general. “Hoy la gente apenas ve que algo sube, deja de comprar”, afirmaron desde la entidad.
La situación deja a los productores en una encrucijada: con menos producto para vender, sin poder subir precios y con costos en aumento, aseguran que están atravesando uno de los peores años en décadas.
