El Gobierno de San Juan ha decidido destinar aproximadamente $2.200 millones mensuales de sus arcas provinciales para garantizar la continuidad de programas de salud que quedaron sin financiamiento nacional. Estos fondos, provenientes de recursos propios de la provincia, buscan cubrir la asistencia médica de miles de sanjuaninos tras la reciente decisión de Nación de dar de baja ciertos planes de salud en todo el país.
La administración sanjuanina enfatizó la importancia de mantener estos servicios básicos de salud, asegurando que ningún ciudadano se verá afectado por la falta de cobertura médica. “Nuestro compromiso es brindar una respuesta inmediata y eficaz ante esta situación, ya que el acceso a la salud es un derecho fundamental de todos los sanjuaninos”, señalaron desde el Ministerio de Salud de la provincia.
Esta medida implica un esfuerzo presupuestario considerable para San Juan, que asumirá los costos que anteriormente estaban bajo la órbita nacional, sumando así una carga significativa al presupuesto provincial. Sin embargo, las autoridades locales sostienen que es indispensable garantizar la atención sanitaria de quienes dependen de estos programas.
